Nos encontramos de lleno en la entrada de la temporada televisiva 2017-2018 y son ya unas cuantas las series que han vuelto. Entre ellas, The Flash. Barry atrapado en la fuerza veloz y el equipo Flash haciendo todo lo posible por mantener Central City a salvo, sin demasiado éxito. ¿Conseguirán salvar el día sin Barry? ¿Cómo llevan su pérdida 6 meses después del final de la tercera temporada? Si seguís leyendo, os encontraréis con SPOILERS.
Duelo
No me había dado cuenta de lo mucho que echaba de menos a estos personajes hasta volver a verlos en acción. Muy a pesar de la insípida temporada anterior, sigo expectante con respecto a lo que esta serie puede ofrecernos. Y es que, si bien las tramas siempre acaban liándose y diluyéndose en un exceso de capítulos que incita a los guionistas a rellenar las semanas con argumentos insustanciales, si algo tiene Flash es, precisamente, unos personajes con un carisma innegable. Y sí, considero que eso, en muchos casos, es capaz de salvar la peor de las temporadas (aunque, por favor, espero que vuelva el tono desenfadado y divertido de la primera y no ese manto de drama constante que tuvo la tercera).
Barry lleva seis meses atrapado en la Fuerza Veloz, aunque es muy probable que para él haya pasado mucho más tiempo (es algo que no aclara el capítulo) y las cosas en Central City no van demasiado bien. Wally hace todo lo que puede para sustituir al auténtico Flash y Cisco trata de seguirle el ritmo portal tras portal, seguidos de Jo y cía con armas molonas. Iris asume el rol de líder del grupo, y Cecile tiene problemas para encontrar espacio a sus cosas en casa de Jo (¿logrará que este se deshaga de su colección de discos?). No pude evitar extrañar a Julian, y me alegra mucho que Catlin haya vuelto al equipo.
Reunión… inesperada
En el episodio vemos que Cisco lleva meses «arreglando» el Bazuca de la Fuerza Veloz y así utilizarlo para traer a Barry de vuelta. Y claro, que un samurai volador aparezca en Central City y exija luchar con el auténtico Flash amenazando con destruir la ciudad parece ser la excusa perfecta. Iris no está de acuerdo, ya que la pobre no quiere ilusionarse para sentir que vuelve a perder el que hubiera sido su futuro esposo. Finalmente, Cisco localiza a Catlin y logran sacar a Barry (porque… ¿quién le hace caso a la periodista?).
Nuestro querido Flash no parece estar en sus cabales y dice cosas sin sentido. Por lo que Iris acaba poniéndose en peligro para despertar al Barry que sabe que sigue estando dentro de él. Vamos, un tópico entre tópicos que resulta efectivo. Barry salva el día, está de vuelta y Cisco a logrado convencer a Catlin de volver a Laboratorios Star.
Y las preguntas
Ahora, ¿quiénes son el calvo y la mujer que aparece al final y que, se supone, son quiénes crearon al robot-samurai? ¿Serán acaso los villanos de la temporada? Sé por entrevistas que este año tendremos un Big Bad no velocista (cosa que se agradece) y solo espero que, al menos, me sorprenda.
¿Qué le ocurre a Catlin? Al parecer, en estos seis meses se ha metido en una especie de grupo un poco chungo y salir de él le ha costado el despertar fugaz de Killer Frost. Me sigue pareciendo extraño que ella sea la única metahumana que no es capaz de controlar su personalidad con «poderes». Y, personalmente, es un tema que me agobia. Quiero a Catlin en el equipo, fuerte, segura y utilizando sus habilidades sin el calentamiento de cabeza de si se le irá la pinza y acabará congelando a sus amigos. Sigo esperando, desde la primera temporada, que le den un argumento coherente e interesante, y que dejen de desaprovecharla. ¿Será este su año?
Como sea, The Flash está de vuelta y, sea o no una buena temporada, no hay duda de que disfrutaremos cada martes con las locas aventuras de Barry, Cisco y compañía.